Tras la pandemia de la COVID-19, las empresas se enfrentan a retos sin precedentes para adaptarse a la rápida evolución del panorama digital y a la dinámica del teletrabajo. A medida que la digitalización y el aprendizaje de idiomas transforman las competencias más demandadas, los departamentos de RR. HH. y de Formación y Desarrollo desempeñan un papel fundamental a la hora de abordar el déficit de cualificación y la ampliación de competencias de los empleados.
Para capear con éxito esta actualidad tumultuosa, las empresas deben adoptar una cultura orientada al desarrollo, que fomente la formación continua, la innovación y la capacidad de adaptación.
En este artículo, analizamos la importancia de una mentalidad de crecimiento en el lugar de trabajo, el papel que desempeñan los departamentos de RR. HH. a la hora de inculcar esta mentalidad y cómo los programas de aprendizaje de idiomas de Busuu pueden facilitar este cometido.
La base de la filosofía de la mentalidad de crecimiento, popularizada por la psicóloga Carol Dweck, es la convicción de que las personas pueden desarrollar sus cualidades naturales mediante el esfuerzo, la perseverancia y la motivación. A pesar del continuo debate entre lo innato y lo adquirido, las investigaciones de Dweck demuestran que las personas pueden mejorar sus competencias, sus capacidades, su talento e incluso su inteligencia a través de la experiencia, la formación y el esfuerzo.
La mentalidad de crecimiento se opone a la tradicional mentalidad fija que muchas personas mantienen con respecto a su predisposición a determinadas tareas y su potencial..
Una mentalidad de crecimiento implica percibir las críticas y los errores como oportunidades de mejora y disfrutar del proceso de aprendizaje. También abarca la convicción de que los obstáculos pueden superarse mediante el aprendizaje, el trabajo duro y la perseverancia para alcanzar nuestros objetivos.
Las investigaciones de Dweck se basan en la teoría de la neuroplasticidad, que respalda la idea de que el cerebro puede seguir formando nuevas conexiones y cambiando a lo largo de la edad adulta, lo que implica que adoptar una mentalidad de crecimiento es posible en cualquier etapa de la vida y puede ayudar a las personas a exprimir todo su potencial a través del aprendizaje y la práctica. Los resultados de sus investigaciones han revolucionado los ámbitos de los negocios, la educación y el deporte.
Más allá de limitarse a una perspectiva optimista, implica asumir retos, apostar por el crecimiento y persistir ante los obstáculos. En el contexto empresarial, para fomentar una cultura corporativa basada en una mentalidad de crecimiento, las empresas deben alejarse de una concepción fija según la cual el talento se considera inherente e inmutable, y centrarse en su lugar en el desarrollo de competencias y la mejora continua.
Los departamentos de RR. HH. y los responsables de la selección de personal tienen la clave para establecer una cultura corporativa de crecimiento a todos los niveles de la empresa. Al pasar de un enfoque centrado en el talento a otro centrado en las competencias, pueden instar a los empleados a desarrollar y mejorar sus capacidades.
Fomentar una mentalidad de crecimiento implica promover un entorno alentador, en el que se valore el esfuerzo, la colaboración y el aprendizaje a partir de los errores. Los programas de aprendizaje de idiomas pueden ser decisivos para demostrar una mentalidad de crecimiento, ya que cuestionan la noción anticuada de que solo determinadas personas pueden aprender un idioma. Invirtiendo en el aprendizaje de idiomas, los departamentos de RR. HH. demuestran su compromiso con el desarrollo y la mejora continua de los empleados.
En el mundo posterior a la pandemia de la COVID-19, los departamentos de RR. HH. se enfrentan al reto de atraer el talento con una mentalidad de crecimiento que permita a la empresa asumir retos y prosperar en un panorama en constante evolución. A medida que se intensifica la competencia por el talento, es esencial fomentar una mentalidad de crecimiento entre los responsables de Recursos Humanos y selección de personal. El 77 % de los empleados tiene en cuenta la cultura de una empresa antes de presentar su candidatura a un empleo, por lo que las empresas deben ser más conscientes de lo que pueden ofrecer para contratar a los perfiles idóneos. Aquellas que prioricen el aprendizaje de idiomas pondrán el foco en su compromiso con el desarrollo personal y profesional de los empleados, fomentando una cultura de aprendizaje y crecimiento continuos. Adoptando una mentalidad de crecimiento, las empresas pueden aprovechar todo el potencial de sus equipos e impulsar el éxito de cada persona y de la empresa en su conjunto.
La digitalización y el teletrabajo han contribuido a la existencia de unos equipos más diversos y políglotas. Así, el aprendizaje de idiomas se ha convertido en una competencia valiosa que mejora la comunicación interna y externa de la empresa, al tiempo que fomenta la colaboración intercultural. Los programas de aprendizaje de idiomas de Busuu proporcionan una plataforma interactiva para equipos remotos e internacionales, lo que permite mejorar la capacidad de trabajo multitarea, la memoria y la toma de decisiones, unos atributos vitales para asumir nuevos retos.